domingo, marzo 25, 2007

Poeta y Ladrón 4

Como luego comprobó que yo no tenía “nada encima” y sospecho de que el profesional era el otro, se deshizo en disculpas.
Luego de tomar nuestros datos personales y de advertirnos que no volvieramos mas por allí, nos dejaron ir. A esas alturas mi odio hacia los guardias crecía y al salir a la calle provoque al otro guardia que hizo el ademán de cargarnos, pero ya estabamos fuera de su terreno.
Luego de este incidente no teníamos ganas de hablar y nos separamos. Subí y baje una y otra vez una calle empedrada, paseando mi rabia, hasta que logré calmarme.
Ya podía compartir lo que Chaquetón solía decir: Mi corazón es un diamante de odio puro.

Lo último que supe de Chaquetón fue a través de una postal que envío desde los Pirineos. Con lo ahorrado en los últimos años compró un terreno cerca de la frontera. El lugar contaba con un pajar que comenzó a habilitar como vivienda. En el estado actual solo servía para vivir en Verano. Al llegar el invierno cuando la nieve comenzaba a cubrirlo todo, Chaquetón se trasladaba a una hospedería para indigentes en el pueblo mas cercano.


Fin




Poeta y Ladrón 3

Volvamos a su oficio de “recolector urbano”. Si Chaquetón Azul era descubierto en una de sus incursiones no decía ni una palabra. Los guardias de los establecimientos no tienen las atribuciones de la policía, por tanto Chaquetón nada les concedía.
Lo que funcionaba casi a la perfección para él, no era igual en caso de ir acompañado. Me ví involucrado en un incidente, en el que comprobé que su habito era compulsivo.
Creí que si iba conmigo no lo haría, porque andábamos de paseo y pensé que él separaba el trabajo de la recreación. Para mí mala suerte fue descubierto, fuimos descubiertos.
La puerta de salida estaba custodiada por dos guardias y la alarma sonó al retirarnos. Nos conminaron a acompañarlos ( a la vista de todos) a una pequeña oficina en el subterráneo.
Como en principio me sentía ajeno a la situación, protesté sacando la peor parte. Recibí un “guantazo” del guardia mas gordo. No fue un golpe muy fuerte, pero si la advertencia de una golpiza próxima, si intentaba escapar o decir algo inconveniente.

Poeta y Ladrón 2

Como si se tratase de un profeta casi sólo se alimentaba de miel queso y pan. De noche prefería leer a la luz de una vela, que hacer uso de la electricidad.

Contaba que había conocido el amor eterno en un encuentro casual en un café. En media hora había conocido al amor de su vida. Se trataba de una joven estudiante alemana. Después de algunos meses del encuentro, tomó la decisión de ir en su búsqueda.
Fue a la ciudad donde estudiaba. Consultó en la universidad con los vagos datos que disponía, pero no pudo dar con ella. Sin embargo se quedó en Alemania varios meses aguardando cualquier noticia sobre ella, al final sin resultados.

En los veranos solía ir a trabajar a las cosechas. La mayor parte del dinero ganado lo ingresaba a una cuenta de ahorro.
Luego retornaba a la ciudad. En nuestra casa paso largas temporadas asilado.
Una noche me llamó sobresaltado diciendo que la okupación donde se encontraba “hospedado” sería asaltada por skinheads y que temía le rompieran la cabeza, tal cual, temía exactamente que le rompieran la cabeza.
En realidad era un invitado que no molestaba y que además “contribuía” a la casa.
Otra vez se marcho por algún tiempo, pero regresó de emergencia.
Esta vez fue victima de un complot en la “okupación”. Las mujeres del grupo le acusaron de consumir pornografía, metiendo revistas entre sus pertenencias y a la vez “descubriendolas”. Luego fue sometido a juicio por los comisarios de la moral “radical” y el tribunal decreto su expulsión.

martes, marzo 20, 2007

Chaquetón azul, poeta y ladrón.

Chaquetón Azul tiene que pasar varias veces ante tí antes de que puedas verlo.
Nunca paga el Metro.

Le conocí un día que llegó al Café donde nos reuníamos cada jueves. De ojos pintados y gestos amanerados, se acercaba demasiado al hablar. Había bebido.
La semana siguiente llego muy compuesto, vistiendo un chaleco de fantasía y lentes (que resultaron ser falsos) y fue muy cauteloso y preciso en sus comentarios.

Al poco tiempo visitó nuestra casa. Llevo té y pasteles finos. Confesó que no había pagado por ellos. En realidad no pagaba nada de lo que extraía de los supermercados, excepto una pistola*. A partir de esa ocasión, no dejo de visitarnos.
Su especialidad eran los libros. Alumnos y profesores se los encargaban. Para nosotros, pintores pobres, obtener buenos libros de arte por un módico precio era una maravilla.
Con las mujeres era galante y les daba la posibilidad de elegir ¿Tenéis algún capricho? Les preguntaba. Por cierto siempre había alguno: Perfumes, guantes, cinturones, chocolates, pañuelos etc.
Todo llegaba desde los grandes almacenes a domicilio a través de sus prodigiosas manos.


* Barra de pan básica

Continuará

Taberna Costera

El Pintor Kritzner interpela al conjunto de la sociedad
a propósito del estado de la cultura.
Tal cosa ocurre en una conocida taberna de la costa.

martes, marzo 13, 2007

La Montaña de la Costa




Desde 1993 excursiono por estos parajes. La montaña de la costa ha sido un lugar muy aislado pese a su proximidad con la ciudad (unos 25 kms. por el cruce desde el Toro Bayo y unos 40 kms. por el camino de la costa. Sus comunidades vivían en paupérrimas condiciones. En los últimos 5 años sin embargo cuentan con luz y agua potable. Esto quiere decir televisión y electodomésticos en general. La señora mas vieja de la comunidad se compró una lavadora.
Se sustentan en base a la leña que cortan y venden(bosque nativo) a sus ovejas, alguna que otra vaca en no muy buenas condiciones y algunas huertas no muy productivas. También pescan o mariscan pero en pequeña escala sólo para sobrevivir.
El impacto de la tala de bosque nativo se nota al cabo de una década. Es de esperar se mantenga un mínimo de sensibilidad de la gente con sus propios espacios. Por ej. se conservan dos pinos mañios a la entrada de un camino. Esto sirve como orientación, pero también como imagen reconocible en el devenir de la comunidad.
Ahora cuentan con subsidios del Estado, que sobre todo tienen que ver con lo forestal.
Una micro va hasta allá, dos veces al día.



lunes, marzo 12, 2007

Mancera





Desde Niebla parece una isla legendaria con su pequeña capilla de juguete. En realidad Mancera fue un bastión fortificado, el mejor refugio del antiguo gobernador de estas tierras.
Para un observador algo sensible Mancera aún conserva una atmósfera de un tiempo antiguo que Niebla perdió con la construcción del puente y los desatinos urbanísticos posteriores ¿Por cuanto tiempo más? Es tan pequeña que no cuesta mucho provocar drásticos cambios en ella. Como ha ocurrido al cortar los Cipreses de la entrada a la isla.
Árboles de 70 años y mas que por decisión de no se quien, se tiran abajo y con ellos el paisaje característico dejando paso a un pobre vacío sin encanto.
Mancera puede ser una pequeña joya en el mapa del sur. Un destino turístico, aunque sea de paso, muy beneficioso para su gente. Administrativamente depende de Corral, que no se bien que hace por ella. El tema de la basura es crucial. Con relativa facilidad podría ser un lugar muy limpio, un modelo, para otras localidades, sin embargo se reproducen los hábitos culturales de parte de la administración(los mismos de los ciudadanos) en cuanto a su mal manejo. Casi no se ven basureros.
Es de esperar que iniciativas como el restaurante, al fondo de la isla, administrado por un grupo de mujeres de la Isla del Rey, siga funcionando. El lugar era espacioso y limpio, y la admnistración comunitaria se agradece en un lugar tan pequeño, lo privado en cambio se notaría demasiado. En estas fechas ya esta tapiado.
Vale, la próxima temporada iré antes. El kujen de las señoras, aunque rústico, se agradece después de una buena caminata.









lunes, marzo 05, 2007

Dylan 66



Ballad for a Thin Man
Dylan en su época más brillante haciendo esas extrañas preguntas a un poderoso Mr. Jones. Estamos en medio de una compleja canción ¿Cómo saldremos de ella?

Elegí este video aunque el tema está incompleto. Las imágenes son impagables y la interpretación musical es inspirada. La onda… el constante diálogo con el órgano.